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12 A: EDITORIAL de febrero ¿Reparto de utilidades en las empresas?
Enfoque del redactor El Plan de ataque a la Pobreza del Pre Desde el punto de vista práctico tamposidente Calderón contempla, aunque sin co pareciera acertado obligar a que un pamayor detalle, su promesa de campaña trono tenga obligatoriamente que repartir política de legislar a fin de que los trabajado parte de sus utilidades con sus trabajadores participen en las utilidades de las empre res, cuando ha sido él quien ha corrido todo sas para las que prestan sus servicios. el riesgo empresarial. Estarían dispuestos En el documento hecho público no se los trabajadores a compartir igualmente las explica ni los alcances ni los medios para eventuales pérdidas que sufra la empresa?
lograr esta meta y se deja como un simple Pareciera que no y este argumento es deciobjetivo del Plan.
sivo para demostrar la incongruencia del Es necesario que desde ahora se co proyecto, además de su evidente falta de mience a discutir sobre los posibles alcan equidad.
ces de tal medida, pues indudablemente Debe tomarse en cuenta, asimismo, que podría tener repercusiones económicas la mayoría de las empresas costarricenses importantes para el país.
son de carácter familiar, es decir, propiedad Desde un punto de vista estrictamente de un solo grupo social. En realidad la sociejurídico será muy difícil obligar a que los dad abierta, de tipo capitalista, es muy empresarios distribuyan sus utilidades con pequeña en Costa Rica todavía, pues el sus trabajadores, pues bastaría con que mercado accionario es muy incipiente. Una aquellos formen sociedades que se dedi medida como la propuesta implicaría un quen exclusivamente a la prestación de desestímulo para numerosas familias que, a servicios y se los vendan a la empresa lo largo de los años, han invertido sus dineproductora de los bienes o servicios. De esa ros en empresas productivas y que crean forma el patrono de los trabajadores o no trabajo para miles de costarricenses. Positendrá dividendos que repartir o si los obtie blemente muchas de ellas preferirán camne será una suma ridícula. Así, de manera biarse al mercado de bonos e inversiones tan simple se anularían las intenciones de la bursátiles para evitarse los problemas derivados de la aplicación de dicha ley. Con ello Pero, además, habría serias dudas cons lógicamente fuentes importantes de empleo titucionales sobre tal medida, pues obligar a desaparecerían del mercado. En esta forma los patronos a compartir sus ganancias, la medicina resultaría más cara que la enfermanu militari con sus trabajadores, implica medad.
una expropiación de su patrimonio sin pago Estos son apenas algunos de los problede indemnización, lo cual sería contrario a la mas que la eventual aprobación de una ley letra y al espíritu del artículo 45 de la Cons de reparto de utilidades produciría en el titución.
país, por lo que consideramos que cualquier Estos dos cuestionamientos jurídicos medida sobre el particular debería meditarnos parece que serían suficientes para que se muy bien para no producir un daño en vez el proyecto en cuestión abortara ad portas, de un beneficio como, de buena fe, se prepues prácticamente serían insuperables tende. Con esta reflexión ponemos punto salvo que, concomitante, se reforme la final al análisis de algunos aspectos del Constitución y se introduzcan reformas llamado Plan de Eliminación de la Pobreza, profundas y contra toda la dogmática, en el que hemos realizado en forma sintética los campo del Derecho Mercantil.
últimos tres días.
LUPITA GONZALEZ El mundo de Ana Ana no puede ver, tampoco oír, y por eso no habla. Su único contacto con la realidad lo constituyen el tacto y el olfato, Hasta hace pocos días, no caminaba, pues su mundo se limitaba a un encierro de madera que le llenó de callos las manos y las rodillas, porque de rodillas vivió mucho tiempo.
Ana tiene años. Sus ojos negrísimos y de espesas pestañas se fijan en la oscuridad de su mundo, mientras sus manos aplauden quién sabe por qué alegría secreta.
Ana no puede llorar. Quizá en su corta vida ha llorado mucho en vano y ya las lágrimas no le salen. Un quejido y la carita con gesticulaciones de dolor constituyen su protesta por lo que no le gusta. En cambio si sabe sonreír y gritar cuando siente emoción.
Tal vez usted conoce a Ana. Ella es la niña que en el programa El Sueño de Navidad, de Telenoticias, usted vio encerrada en un cajón y para quien sus padres pedían ayuda, pues padeció de meningitis cuando tenía cuatro meses de edad.
Ella es la niña que las monjas del Amparo San Pedro Claver de Pavas cuidan como a una hija y han tratado de darle todo lo que está a su alcance. Lo triste es que ellas no tienen todo a su alcance.
Hasta ahora, Ana ha sido examinada por varios galenos, que de manera desinteresada han tratado de encontrar todos los caminos que le permitirían a la niña ponerse en contacto con el mundo exterior.
El oftalmólogo asegura que no podrá volver a ver. Pero el otorrinolaringólogo dice que sí podrá oír cuando se le pongan audífonos. De esta manera, probablemente también aprenderá a hablar y a hacer muchas otras cosas.
El neurólogo que la valoró descubrió que padece epilepsia y ya le envió tratamiento para evitar que le den los ataques.
Cuando llegó, a mediados de enero, tenía ocho o diez por día, ahora sólo dos.
Las hermanas del Amparo le han enseñado caminar, a comer con cuchara, pues antes sólo lo hacía con las manos; a tomar, primero en chupón y ahora en beberito. y le están enseñando a amar.
La madre superiora asegura que el amor parece ser la única llave de entrada a ese mundo de tinieblas, que podría mejorar con la ayuda de todos nosotros. Por qué no pagamos, de alguna manera, los oídos sanos de nuestros hijos. Por qué no dar algo a cambio de los parloteos dulces de un bebé que nos mira a los ojos y sonrie?
Lo que Ana necesita ahora es dinero. Ya tiene amor y atención. Ahora lo que requiere es dinero para comprar paña.
les, para adquirir sus aparatos de rehabilitación, sus medicinas, para pagar educación especial.
Lo que Ana necesita, además, es gente que se comprometa a ayudarla. Qué cuesta sacar 100 al mes, de manera fija, para apadrinar a esta pequeñita a la que la vida le ha dado tan poco.
Decidase. Llame por el teléfono 32 0990 y ofrezca su colaboración. No importa cuan pequeña sea. Puede contar con que hasta el último céntimo servirá para aliviar el grueso fardo que pesa sobre esta niña.
ley.
La República CREO QUE HUSSEIN TIENE UNA CARTA EN LA MANGA Publicado por Editorial La Razón Director: Yehudi Monestel Arce Gerente General: Luis Guillermo Holst Quirós label Jefe de Redacción: Jesús Mora Rodríguez Subgerente General: Alvaro Loría Campos Editor de Diseño: Luis Cartín Sánchez Gerente de Publicidad: Roberto Ulloa Monge Central telefónica Ejecutivos de Publicidad: 57 11 33 23 02 66 Publicidad: 22 92 15 Oficina San José Cobros: 23 03 09 21 51 96 Suscripciones: 23 88 85 Oficina Bº Amón 57 04 11 Apartado: 2130 1000. Telex: 2538 Facsímil 55 39 50 LA REPUBLICA Las publicaciones en este tipo de letra son pagadas.
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