positivos, los no inmunizados y colocados en el mismo establo se obtuvieron resultados Cúmplenos agregar, que las investigaciones recientes del señor Thoma.
ssen, profesor de la escuela de veterinaria de Utrech, han corroborado del todo la posibilidad de conferir los jóvenes vovídeos, por medio de bacilos tuberculosos de origen humano, la inmunidad respecto de la tuberculosis, cualquiera que sea su forma y desarrollo.
Cinco experimentos distintos, efectuó el catedrático últimamente citado, cambiando en un todo las condiciones de los animales consiguiendo siempre iguales resultados que el señor von Behring; la inmunidad de los individuos vacunados debidamente.
Ahora bien: partiendo del hecho de que la especie humana, no ofrece grandes diferencias con la vovídea, en cuanto al momento en que el sujeto puede infeccionarse con el microbio patógeno, opina el director del Instituto de Higiene de Marburgo que es preciso combatir en los niños recién nacidos y en los de más edad que lactan, tal tendencia y hacer en ellos lo que se efec.
túa ya en gran escala con los jóvenes vovídeos, Como no cabe el que se piense introducir en las venas de los infantes, bacilus vivos, aun cuando su virulencia esté atenuada, entiende el señor von Behring que sería posible utilizar anticuerpos procedentes de animales previamente inmunizados, tanto más, cuanto que durante las primeras semanas de la vida, la mucosa intestinal se manifiesta tan permeable respecto de los anticuerpos, como de los bacilos.
El erudito profesor de Marburgo continúa haciendo nuevos estudios, no solo con el propósito de la profilaxia de la tuberculosis vovina, sino con el plausible ideal de sentar sobre bases sólidas, la inmunización con respecto la tuberculosis en el hombre, que tanto interesa, Expuesto lo que precede, terminamos diciendo con el distinguido doctor Chenisse: El tiempo nos dirá hasta qué punto se hallan conformes con la realidad, tan hermosas esperanzas.
DR. GORDON PARA DISMINUIR EL DOLOR DE LAS QUEMADURAS ESCALDADURas nada mejor que hacer una pasta de carbonato de sosa con agua fría y aplicarla rápidamente a la parte lastimada, vendándola después con un pedazo de tela.
LA HIEL DE BUEY ES MUY ÚTIL PARA LA LIMPIEZA. Constituye un jabón de sosa liquido. Sirve para las manchas de grasa y también para fijar y dar brillo los colores; pero no conviene aplicaria objetos blancos porque los teñiría ligeramente de verde.
LOS BAÑOS OBJETOS DE LOza de las alcobas se limpian muy bien frotándolos con sal perfectamente seca. No hace falta más para quitar toda suciedad sin estropear los objetos ni quitarles nada de brillo.
TAFETÁN PARA LAS HERIDAS. Hágase una solución con 30 gramos de caucho en diminutos pedazos y 600 grs. de cloroformo.
Prepárese aparte 30 gramos de caucho, cortados del mismo modo, con 12 gramos de resina, y luego añádase 30 gramos de trementina de Venecia, todo lo cual se disolverá en 60 gramos de aceite de trementina. Por último, mésclense las soluciones, se embadurna con ellas el tafetán y puede usarse cuando se necesite.
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