Don Juan de Dios Céspedes Gómez Para unos es la sublime, la celestial diosa: para otros es una vaca lechera que les procura manteca. SCHILLER)
De entre el número de los vivientes, no de entre los vivos, acaba de desaparecer la personalidad insigne con cuyo nombre encabezamos estas páginas.
No las escribimos por el prurito de biografiar: quieren los amigos cariñosos y discípulos agradecidos que digamos algo sobre el breve y luminoso paso del maestro por esta senda de dolor que llama vida: y ya que la modestia innata que siempre lo acompañó no lia de ofenderse a hora, nuestra pluma escasa de figuras pero abundante en sinceridad y exactitud, va a descorrer el velo que cubre una existencia pletórica de rasgos nobles y virtudes raras.
Don Juan de Dios Céspedes nació en la ciudad de Cartago el de junio de 1849. Difícil nos sería seguir paso a paso la estela brillante de su vida, en la cual culminan como notas que lo particularizan, dos: el culto a la ciencia y su difusión y su gran cariño la liumanidad, la cual consideró siempre como un conjunto de hermanos suyos.
Muy joven ingresó en la Universidad de Santo Tomás: cerebro bien constituído: aspiraciones insaciables de beber en la fuente de la sabiduría: constante laboriosidad lo distinguieron siempre; testimonio de ello son las dedicatorias y estimulos de precio con que siis profesores lo alentaban por haber obtenido la mejor calificación; sus papeles, cuidadosamente guardados y coleccionaDon Juan de Dios Céspedes Gómez dos, así lo expresa 11.
En 1868 el profesor Luciano Platt, de grata memoria para Costa Rica. Catedrático de Física y Química, le extendió certificación de haber cursado ambas ciencias con gran provecho para merecer dignamente 1728