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La vida y el artista Los más grandes pintores de la naturaleza humana, los que han escrutado profundamente sus misterios, y más elocuentemente traducido sus alegrías y sus dolores, fueron acaso hombres que vivieron vida apasionada y cargada de dramas de corazón?
No, sino más bien artistas de profesión, de corta experiencia, de destino casi sin importancia y de monótoma vida, retraídos del mundo, y cuyas importantes aventuras fueron sencillamente sus obras. En qué momento Shakespeare, ha podido vivir y dejarse arrebatar por una multitud, él, que durante treinta años tuvo apenas tiempo para desempeñar las laboriosas funciones de actor dra mático, de autor y de empresario. En qué época Moliére, quien su profesión tenía separado del mundo, pudo experimentar el amor en condiciones tan mediocres y casi ridículas. En qué época Balzac, ese presidiario, ese forzado de literatura, que antes, en 1829, habia ya compuesto toda una biblioteca entera de novelas firmadas con pseudónimos, y que de 1829 1849 concibió y realizó los cua renta volúmenes de la Comedia Humana. El desvío es demasiado notaEl maestro italiano Leoncavallo, ble en esos casos, maestros emiautor de la ópera Pagliari nentes de la observación entre la obra y la experiencia pasional, para que pueda atribuirse tal efecto semejante causa; por el contrario, la literatura espontánea, de memoria y correspondencias, que todo interesa a nuestra generación y que emana con frecuencia de personas que han vivido mucho y con vida muy intensa. sobresale, con raras excepciones, el nivel del documento? El dón de expresión es allí infinitamente raro; también el dón de dar colorido esa vida, de lo cual los actores han participado, sin embargo, y los que se encuentran todavía mezclados por el rencor, los pesares, el amor propio el entusiasmo. Concluyamos, pues, que la mejor condición de nacimiento y desarrollo para el talento literario, es una existencia mediana, más bien reflexiva que agitada, y más de contemplativo que de hombre de acción.
PAUL BOURGET 1865
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