Guardar

Discurso de Juan Pablo Il en la inauguración de la III Conferencia Breve comentario de un grupo de teólogos OBSERVACIONES GENERALES VERDAD SOBRE JESUCRISTO CRISTOLOGIA LIBERADORA EN EL DISCURSO PAPAL El discurso del Papa señala que las conclusiones de Medellin deben ser el punto de partida para la III conferencia de Puebla. El Documento de trabajo, servirá de guía para los debates. El Papa insiste en la importancia de la exhortación apostólica Evangelii Nuntiandi de Pablo VI, cuyo texto cita continuamente. En varias de sus intervenciones públicas y también en este discurso, el Papa ha invitado a tomar los textos del Con.
cilio Vaticano Il, en especial Lumen Gentium y Gaudium et Spes, para llevar adelante, en función de las necesidades presentes de América Latina, la acción pastoral de la Iglesia. Se observa con mucha claridad, en este discurso y en otras alocuciones del Papa, una distinción entre: 1) las afirmaciones fundamentales que hace y que se sitúan en la perspectiva del compromiso con los pobres, 2) El rechazo a las desviaciones y abusos que se ha hecho de cierto vocabulario. Por lo tanto, las reservas del Papa deben ser comprendidas a partir de lo que afirma positivamente. Esto es decisivo para impedir la manipulación de lo dicho por él. Las reservas hechas por el Papa contra los abusos y desviaciones, no deben ocultar, sino por el contraу rlo, hacer resaltar los temas centrales de los discursos papales, los cuales se sitúan con todo rigor en una perspectiva liberadora.
13 Tanto los discursos como los gestos concretos del Papa se sitúan en la perspectiva del compromiso con los pobres, en la que tanto ha insistido la Pastoral y la Teología Latinoamericanas.
Ya en Santo Domingo, el Papa saludó entrañablemente a los pobres, campesinos, enfermos y marginados, a todos aquellos que desde el primer momento de la evangelización fueron objeto preferencial de la solicitud de la Iglesia. Del mismo modo en la homilia de la Catedral de Santo Domingo habló sobre la situación de despojo de los campesinos, de los trabajadores maltratados y disminuidos en sus derechos, así como la explotación del hombre por el hombre o por el estado. En esa homilía y en el discurso inaugural de la lll conferencia, el Papa se refiere a la identificación de Cristo con los más desheredados, citando el texto clave de Mt. 25, 31 ss. Cf. III, 2) La misión evangelizadora de la Iglesia tiene como parte indispensable la acción por la justicia y las tareas de promoción del hombre (1 1, Siguiendo modelo de Cristo, el Papa insiste en la defensa de los derechos humanos, en especial el compromiso con los más necesitados. como un auténtico compromiso evangélico (cf. Mi, Denuncia la riqueza de unos pocos hecha a costa de la pobreza de muchos, así como los mecanismos de interdependencia que originan esta situación (cf. III, Todos estos temas están presentes en Medellin, así como en la acción pastoral y en la teologia liberadora de América Latina.
Todo esto que el Papa afirma positivamente en una perspecti.
va liberadora, adquiere mayor valor cuando el Papa critica y rechaza el empleo abusivo de ciertos términos o de ciertas teologías ambiguas. Dichas reservas buscan salir al paso de casos aislados que, por desgracia, se presentan, y en los que se deforman expresiones que han nacido y que viven en un contexto de probada fe ecleslal. La tercera parte del discurso papal es el trozo esencial y debe servir como clave de interpretación y como criterio para leer el discurso inaugural en su integridad. El mismo Papa lo dice. Aquí es donde encontramos, llevados a la práctica concretamente, los temas que hemos abordado al hablar de la verdad sobre Cristo, sobre la Iglesia y sobre el hombre. 1, Esta tercera parte es pues fundamental por su desarrollo concreto y positivo para comprender los temas señalados y para ver por dón.
de debe orientarse de una manera abierta y creadora la tarea evangelizadora de la Iglesia hoy en América Latina. La cristología en el discurso papal tiene dos niveles de elaboración. en la primera parte reafirma el dogma básico de la fe en la divinidad de Jesucristo y condena las reducciones y deformaciones.
en la tercera parte traduce el significado de este dogma básico a las condiciones históricas de América Latina y expone asi una cristología con rasgos francamente liberadores. El Papa condena las relecturas del Evangelio, resultado de especulaciones teóricas, más bien que de auténtica meditación de la Palabra de Dios y de un verdadero compromiso evangélico (1. Estas relecturas específicas, que silencian la divinidad de Jesús o lo reducen a un mero profeta o político, son ajenas a las cristologías que se han escrito en América Latina, que buscan ser fieles a la verdad del evangelio que narra la historia, pasión y resurrección de Jesús, especialmente sus controversias, conflictos, desenmascaramientos, persecución, tortura y crucifixión, a raiz de su fidelidad a Dios y a los hombres. Las palabras del Papa en la tercera parte de su discurso asumen muchos de los rasgos liberadores, en los cuales ha insisti.
do la cristología latinoamericana. Cristo revelador de la Verdad sobre el hombre que es base de la verdadera liberación. Cristo, modelo de atención a todas las necesidades humanas. Cristo, identificado con los desheredados. Cristo, anunció y realizó la liberación integral Cristo, no permaneció indiferente a los imperativos de la moral social, Estos rasgos cristológicos son elementos esenciales, según el mismo Papa (1, de la solida Cristología que ha de iluminar los temas y cuestiones pastorales.
VERDAD SOBRE LA MISION DE LA IGLESIA SU SERVICIO DE UNIDAD Un primer punto a destacar en el discurso del Papa es la relación entre evangelización e Iglesia: No hay garantía de una acción evangelizadora seria y vigorosa sin una eclesiologla bien cimentada (1. Evangelizar es la misión esencial, la vocación propla, la identidad más profunda de la Iglesia, a su vez evangelizada y evangelizar no es para nadie un acto individual y aislado, sino profundamente eclesial, un acto de la Iglesia. Sobre el origen de la Iglesia, el Padre rechaza el sentido exclusivista de la expresión pueblo como categoría na.
cional (discurso en la Catedral. aplicada a la fórmula Una Iglesia que nace del Pueblo. Pero al mismo tiempo el Papa afirma que: La Iglesia nace de la respuesta de fe que nosotros damos a Cristo. lo que corresponde al sentido profundo de la expresión La Iglesia nace del pueblo bajo la acción del Espíritu Santo que emplea la teologia latinoamericana a partir de la experiencia de las comunidades eclesiales de base que surgen entre los pobres Con razón rechaza el Papa la reducción secularista del Reino de Dios, como si a él se llegara por el mero cambio estructural y el compromiso socio político. La misma pastoral y teología latinoamericanas han sido muy cuidadosas en evitar este tipo de reduccionismo que parcializa y vacía de fuerza la dinámica del Reino de Dios, que es al mismo tiempo espiritual e histórica, presente ya entre los hombres y escatológica. También con mucha razón el Papa rechaza la oposición entre una Iglesia institucional u oficial y otra Iglesia popular que nace del pueblo. En América Latina se ha buscado insis13

    Notas

    Este documento no posee notas.