Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
ACCRA (AFP) Los representantes de países ricos y en vías de desarrollo iniciaron este jueves en Accra unas conversaciones climáticas importantes, cuando el tiempo apremia para avalar un plan que regule el calentamiento global una vez que expire el Protocolo de Kioto en 2012.
"El tiempo apremia", insistió este jueves Yvo de Boer, secretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas sobre los Cambios Climáticos (CNUCC), ante los cerca de 1.600 delegados de 160 países, de ONG y del mundo económico, reunidos hasta el 27 de agosto en Accra.
La comunidad internacional se ha dado hasta diciembre de 2009 para definir un nuevo marco de lucha contra el efecto invernadero, que sucederá al Protocolo de Kioto, cuya primera fase expira en 2012.
La conferencia de Accra, a nivel de expertos, es la tercera cita desde la conferencia ministerial de Bali (Indonesia) en diciembre de 2007 y la última antes de la gran cita ministerial de la CNUCC en diciembre en Poznan (Polonia).
El sentimiento de urgencia se ha visto amplificado al celebrarse la reunión en África, un continente especialmente vulnerable a las alteraciones climáticas.
"Las precipitaciones en Ghana han disminuido un 20% en 30 años; 1.000 km2 de tierras cultivables se han perdido en el delta del río Volta por la subida del océano", recordó Boer, que animó a las delegaciones a mostrarse "ambiciosas, porque si fracasáis, África seguirá siendo el continente olvidado del cambio climático".
Para el presidente de Ghana y anfitrión de la reunión, John Kufuor, habrá que estudiar en Accra el cómo financiar y apoyar las medidas de adaptación en países como el suyo. Recientes estudios internacionales han evaluado las necesidades anuales en decenas de miles de millones de dólares, recordó.
Pero según Yvo de Boer, "los gobiernos tienen que concentrarse también en los esfuerzos de reducción de las emisiones causadas por la deforestación y la degradación de los bosques", que conciernen de manera especial a algunos países emergentes como Brasil o Indonesia.
En paralelo, los países ricos, todos ellos firmantes del Protocolo de Kioto con la excepción de Estados Unidos, deben precisar cuáles serán sus objetivos de reducción de emisiones de gases bajo el próximo régimen, y cuáles son los instrumentos que emplearán para lograrlo.
Según los científicos del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC, en sus siglas en inglés), los países ricos tienen que reducir en al menos un 50%, e incluso un 80%, sus emisiones contaminantes de aquí a 2050 (respecto a 1990), con un objetivo intermedio de reducción en 2020 de entre un 25% y un 40%.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) deseó el jueves en un comunicado que "los progresos alcanzados en Accra sean más rápidos, el nivel de ambición más elevado y las medidas de reducción de gases más fuertes".
© 2008 AFP
Este documento no posee notas.